jueves, 13 de marzo de 2008

Sin Rutina...

He viajado mucho durante estos meses. No es una queja. En absoluto.
He cambiado de casa 3 veces en menos de 3 meses, he pasado de soltera independiente a visitante-conviviente, luego a hija prodiga y finalmente a practicante/estudiante y turista en un país donde, por primera vez entiendo en carne propia la importancia de la existencia de un lenguaje casi universal.
De Madrid a Dublín, de Dublín a Madrid, de Madrid a Lima y de Lima a Amsterdam, pasando por Madrid para cambiar maletas de verano por las de invierno -un cambio bastante brusco que descompone cualquier cuerpo, por lo menos un par de días.

Comenzaré por Dublín. Digamos que comenzaré en orden.
Dublín, en tres días. Es el mundo al revés, donde hay que seguir indicaciones para cruzar una calle sin ser atropellado; es el mundo mojado, donde dicen que llueve incluso todo el verano; el lugar de las luchas sociales, donde la paredes, las veredas y las calles hablan y protestan pacífica pero constantemente. Es el lugar donde las bicicletas ruedan como medio de transporte, aunque su uso es moderado a comparación de otras ciudades mucho más ciclistas; Dublín es el lugar de los músicos -jóvenes e inovadores-, la ciudad de los universitarios unidos por interesantes causas... la ciudad del "Fish and Chips" donde miles de famosos hemos ido a engrasarnos...
Tomando una Guiness, aunque mejor, para mi, una Heineken llaman la atención los distintos suelos que hay que pisar.


¡¡Dublín, en Enero y siempre, esta mojado. Es un tanto oscuro y tiene un aire muy inglés... aun asi y sin saber exactamente por qué, me gustaría volver!!

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Hola Valerie, ya estaba extrañando tus posts.

    Se ve que Dublín es una ciudad muy especial, con muchos carteles en el piso y las paredes. Muchas bicicletas. Las calles empedradas y mojadas

    Saludos

    ResponderEliminar