miércoles, 17 de diciembre de 2008

Z.A.P.A.T.A.Z.O

Hoy me desperté pensando en el ZAPATAZO que tantas ganas y tantas veces había tenido yo de meterle a Bush en plena cara. Ayer estuve viéndo el video hasta el cansancio, en disitintas velocidades, desde diferentes ángulos. La agilidad de Bush me impresionó. La puntería del periodista también. Quítate tu los zapatos y con todos los nervios del momento encájaselos justo donde estaba su cara. Concluí que Bush hace ejercicio. Algo de artes marciales para ser más exacta. Lo miraré, pero creo que sí porque en el segundo ataque estaba completamente alerta, cuadrado y ya no se le veía ágil, se le veía tieso, como un árbol. Frío. Esperado el siguiente golpe. Si hubiera podido matar con los ojos a mi héroe, léase el periodista que lo agredió, lo hubiera hecho. Pero para eso ya están los de seguridad que lo sentaron de un puñete y, según me cuentan 'mis fuentes', a estas alturas ya le han roto a golpes más costillas de las que tiene. Habrá que seguirle la pista. ¿Alguien tiene presupuesto para mandarme a Bagdad?




"El atentado del zapato, el único atentado que ha logrado arrancar carcajadas de orgullo".
Hay en la red un jueguito donde se lanzan zapatos a Bush, pero le disparas a los zapatos. No tiene gracia.
Bush declara que es lo más bizarro que le ha pasado. A su reputación, por lo menos.
Hay viñetas muy buenas. Estas son de Abu Mahjoob

2 comentarios:

  1. Estimada colega. Hoy leo en la prensa holandesa (NRCNext) que el iraquí al-Zeidi se convirtió en Oriente Medio en un héroe popular. Durante los pasados tres días sigue ocupando la página principal de los periódicos. La mayoría de los comentarios coinciden en decir que él hizo lo que sus líderes no se atreven a hacer. Un hombre en Egipto le ofrece la mano de su hija, de 20 años. "El hombre de los zapatos de oro", le dicen. Su hermano asegura, contradiciendo especulaciones tendenciosas, que el zapato es ciento por ciento de fabricación iraquí. ¡Un saludo!

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